La peligrosa tendencia de utilizar pestañas postizas

Cada vez vemos a más artista e influencers llevar unas pestañas de infarto. Una tendencia que ha venido para quedarse y que, a simple vista, parece no ser peligrosa. Sin embargo, esas pestañas largas, teñídas de negro carbón y que te hacen tener la mirada más espectacular del planeta, esconden riesgos para nuestra piel y ojos. Si hasta ahora soñabas con llevarlas, quizá ya no quieras hacerlo después de leer ésto.

Dermatitis por contacto

El contacto de estas pestañas con la piel de nuestro párpado puede derivar en una dermatitis alérgica. Se trata de una mala noticia para todas aquellas que las lleven puestas, ya que es un peligro que puede aparecer cuando menos lo esperamos. En caso de que así sea, los expertos recomiendan retirar el acrílico de estas pestañas lo antes posible para reparar daños. Además, según los especialistas, aquellas personas con pieles sensibles y propensas a reacciones alérgicas tienen una mayor probabilidad de padecer dermatitis. 

¿Por qué ocurre?

Uno de los principales causantes es el pegamento que se utiliza. Éste entra en contacto directo con la piel o la córnea y la sustancia química que contiene, formaldehído, genera estas reacciones alérgicas. No sólo eso, las extensiones extremadamente largas tienden a acumular suciedad y bacterias que pueden dar lugar a una infecciones oculares.  

¿Cómo saber si tienes alergia? 

Si al momento de colocarte la pestaña o pasado un breve periodo de tiempo (horas o días) notas escozor e inflamación en la zona donde ha sido colocada, puedes estar sufriendo una reacción alérgica. Una molestia que puede resultar poco alarmante si tenemos en cuenta que en el peor de los casos pueden llegar a darse problemas de visión. Eso sí, el problema se agrava cuando dicha inflamación se presenta en zonas alejadas del ojo por lo que no relacionas esta reacción con el tratamiento de belleza. Por eso, es importante hacer un diagnóstico rápido para combatir la alergia o infección lo antes posible.