Las claves que confirman que la música te ayuda a estudiar

¿Cuántos momentos de tu vida están marcados por la música? Hagamos un poco de memoria porque seguro que hay alguna canción que te recuerda a una persona especial, un momento feliz que viviste o que te ayudó a superar ese bache. Lo que está claro es que, de una manera u otra, la música forma parte de nuestras vidas. Pues en los estudios y en el trabajo ocurre igual. Hay quien ameniza las largas jornadas de estudio con ritmos que les ayuda a concentrarse.

En este sentido, la ciencia ha probado que la música nos motiva. Cuando escuchamos un sonido que nos gusta, nuestro cerebro libera dopamina, un neurotransmisor que nos aporta una sensación de placer y nos ayuda a combatir el estrés. Pero no sólo mejora nuestro estado de ánimo, también favorece a la concentración. Aunque hay quien prefiere estudiar en absoluto silencio, lo cierto es que existen estudios que demuestran que escuchar música entre las tareas aumenta la productividad y la concentración. 

Así lo demuestra una investigación llevada a cabo por la Universidad de Windsor (Canadá). El estudio consistía en conocer el efecto de la música en los trabajadores de una empresa y se demostró que aquellos que escuchaban música mientras trabajaban, se volvieron más productivos, acabando sus tareas antes e incluso tenían ideas más originales que los que lo hacían en silencio. Así que sí, la música te puede ayudar a estudiar.

Y nos concentraremos aún más si nos ponemos los auriculares. Éstos hacen que nos evadamos por completo y evitemos cualquier tipo de distracción. Para entenderlo mejor sólo tenemos que pensar en aquellos “ruiditos” que muchas veces nos incomodan y hacen que no podamos prestar atención a lo que estamos haciendo. Por ejemplo, el sonido del reloj, una persona mascando chicle o las teclas de un ordenador. El problema está en que nuestro cerebro tiene una zona que controla la atención y otra que es incontrolable. Por eso, hasta el ruido más mínimo a veces nos distrae. 

Eso sí, cada persona es un mundo. Hay quienes prefieren música clásica, relajante o marchosa para estudiar. No a todos los ayuda lo mismo y tampoco hay un estudio que confirme cuál es el tipo de música perfecta. Lo que sí es recomendable hacer un playlist para no interrumpir el estudio cambiando de canción.

Si por el contrario eres de los que prefiere estudiar en silencio, te recomendamos que escuches música en los descansos. Al igual que hacer deporte, la música te evade y hace que te distraigas. Ya sabes que tomarse un respiro entre tema y tema siempre viene bien para descansar la mente y no aturullarnos con tanto contenido. En este caso,¡ engánchate a los djs de MegaStar! ¡Te ayudarán a refrescar tu mente con los mejores temazos!