Los secretos del primer encuentro de Manuel Turizo con Shakira para grabar 'Copa Vacía'

Manuel Turizo es el rey de la bachata y, ante eso, no hay dudas. Ese temazo con el nombre de este género musical que lo ha petado y que le ha llevado a lo más alto de la música latina. También a hacer una pedazo de gira en medio de la que tan solo ha tenido "10 días en los qu eme desconecté del todo en Colombia". Así se lo contaba a Pablo Motos, sentado en el plató de 'El Hormiguero', aprovechando que pasaba un par de días por Madrid antes de retomar el ritmo frenético de su 'tour' mundial con el que, este mismo jueves, aterrizará en Estados Unidos.

¿Cómo lo aguanta? ¿Cómo es ir de un lado para otro sin casi tiempo a cerrar los ojos para interiorizar qué es lo que está pasando? "Sin dormir. No, trabajando para seguir. Siento que cada vez que vas logrando más cosas hay más compromiso para seguir trabajando". Eso sí, cuando tiene un rato libre para dedicarse a sí mismo y al tan necesario ocio, siempre hay una cosa en el 'top' de actividades por las que muere: "Kitesurf, en realidad me gustan todos los deportes que tengan que ver con el mar". Normal, es uno de los medios naturales que más tranquilidad ofrecen a quien se deja llevar por él.

Secretos de 'backstage'

Más allá de los caprichos que se haya podido dar -lo último, un reloj "un poco caro" y una moto de agua que terminó vendiendo-, el momento dulce en el que se ha instalado con su música le está permintiendo trabajar con grandes figuras de la industria. Y sobre una de ellas, en concreto, hablaba con un halo de reconocimiento y admiración: Shakira. "No la conocía, nos conocimos en el vídeo y luego ya… pues es que es Shakira". Y daba unas pinceladas más de cómo fue ese primer encuentro con ella, una de las mujeres más poderosas de este mundillo: "Cuando yo llegué ella se estaba arreglando, hablamos un rato y después nos fuimos a grabar". Para los desubicados, efectivamente, está hablando de esa 'Copa Vacía' que tanto está triunfando estos meses y que te dejamos bajo estas líneas.

A lo largo de esa charla, y más allá de reconocer que le hacen videollamadas para que vea cómo se encuentran sus caballos o que México se ha convertido en una segunda patria para él, despeja la duda de si se lanzará al mundo de la interpretación próximamente. "Me han ofrecido cosas pero no hemos concretado nada. Si hay una propuesta en la que me sienta que puedo aportar, lo haré". Es la respuesta yajante que daba. Lo hacía después de hablar de cómo una vez le dieron para comer, en su país, cuy. ¿Que qué es? Con las palabras de Turizo se entiende más que bien: "Aquí le dirían rata, es como un hamster gigante, la carne es limpia, es tierna, es una comida cultural de allí. En Colombia también se comen hormigas culonas".